La numeración forma parte de una jerarquía de técnicas para contar según Arthur Baroody, se dice que cuando una técnica se ejecuta eficazmente se puede procesar de manera simultánea o integrar con otras técnicas en la memoria de trabajo para formar una técnica aún más compleja.
La técnica más básica es generar sistemáticamente los nombres de los números en el orden adecuado, la serie numérica oral; que suele compararse con “contar de memoria”, pero esto no significa que el niño sepa lo que equivalen esas cantidades que menciona. Los niños pueden aprender la serie oral pero no siempre pueden utilizarla para enumerar; esta serie se convierte en un instrumento para ir transformando los conocimientos numéricos intuitivos en verdaderos conceptos operatorios.
La segunda técnica trata de aplicar a cada objeto de un conjunto la palabra o etiqueta de la secuencia numérica, contar objetos, también denominado enumeración; es una técnica complicada porque el niño debe coordinar la verbalización de la serie numérica con el señalamiento de cada elemento de la colección.
La enumeración es un proceso que el niño construye de manera gradual ya que se enfrentan con un desafío de coordinación al asignarles palabras o etiquetas de la serie numérica a los elementos de un conjunto. El enumerar requiere práctica porque es común que los niños comentan errores.
Para que un niño llegue a dominar este aspecto es necesario que: enumere o cuente, presente la regla del valor cardinal, así como la regla de cuenta cardinal y finalmente la separación. Durante este proceso puede haber errores, los cuales se han clasificando de la siguiente manera: a) generar una serie numérica incorrecta (errores de secuencia); b) llevar un control inexacto de los elementos contados y no contados (errores de partición), y c) no coordinar la elaboración de la serie numérica y el proceso de control de los elementos contados y no contados (errores de coordinación).
Pasando a la regla del valor cardinal se refiere a cuando contamos un conjunto, recordamos el último número que decimos porque así sabremos cuántas cosas hemos contado y muy ligado a esto se encuentra la regla de la cuenta cardinal, que implica saber que un número es al mismo tiempo un número y determina una cantidad.
Finalmente se encuentra la separación que como su nombre lo dice, es la acción de separar con precisión conjuntos; uno de los errores más comunes cuando se retiran objetos de un conjunto es “no pararse”, es decir, no detenerse en el proceso de contar cuando se ha llegado al objetivo, o están tan concentrados en el proceso de enumeración que olvidan el objetivo.